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jueves, 27 de febrero de 2020
EL QUE HAYA VOLCAO QUE DESENVUELQUE
Contaban que Mariano C. fue a acarrear con su padre. Ya de vuelta, el carro de la mies volcó. Mariano todo tranquilo le dijo a su padre:
– Aureliete, yo me voy al pueblo, el que haya volcao que desenvuelque. Y allí dejo al padre, al carro y la mies por los suelos.
M.C.debio ser un tipo especial". Yo no lo conocí. Debió vivir en la primera mitad del siglo pasado.
De él se contaban muchos chascarrillos. Era muy pobre pero pretendia ser novio de las más ricas del pueblo.
En una fiesta de la víspera de San Juan, cuando los quintos ponían enramadas en las puertas y balcones de las mozas, lo subieron al balcón de su pretendida para que le pusiera una rama de cerezas. Quitaron la escalera por la que había subido y lo dejaron allí.
Vivía con su padre, en la misma casa y contaban que cuando murió su padre, encontraron el cadáver amortajado en la bodega.
martes, 18 de febrero de 2020
EL AGÜELO ISAÍAS
Nació en Royuela en 1896. Vivió 75 años. Oficialmente se llamaba Zacarías pero todos le llamaban Isaías o Barrera. Su madre Felipa Burzurí era de Calomarde y su padre, José, nacio en Arroyofrio. Conocí a sus hermanos que vivían en Royuela: Julián, Clemencia y Feliciana y a su media hermana Ramona que vivía en Teruel. Un hermano, Manuel, murió en época de guerra al pisar una mina,en Royuela. Se bajó de La Sierra, muy joven, a principios de los años 10 de criado a casa de los Sanz, en la calle del Horno. Contaban que era tan joven y de tan poca estatura que casi no podia ponerle el collerón a los machos. Al poco tiempo cambio de amo. Estuvo en casa del tío Ángel el Roche y de la tía Pilar la Melguiza hasta que se casó con Consuelo.
Era muy activo y trabajador. Se dormía en el momento que se sentaba, como por ejemplo en las noches de azafranes. Subía muy a menudo a La Sierra andando o con el burro a comprar ganado para la carnicería.
Muy interesado. Recuerdo que unos meses antes de morir bajo del basurero unas botas, en regular estado, para mí. Recuerdo también un día que estábamos en el campo arrancando guijas y se me clavaban algunas punchas de cardos secos y me paraba a quitármelas, me decía :
– ¡ Déjate las punchas p'al invierno ! Y sigue trabajando.
No sé si ese mismo día u otro que me hacía el remolón en el trabajo, profetizó y oí que le decía a mi padre, sobre mi :
–¡ Éste, ni señorito ni labrador ! ( Ya había empezado yo a estudiar en Teruel con la beca). Y acertó.
Tuvo y todavia tiene 17 nietos. En el año 71 en que murió, le oí quejarse de como llamábamos a Pili, Tere y Mari Carmen :
– Entre la Peli, la Teri y la Meri, vaya lío de nombres.
Era muy activo y trabajador. Se dormía en el momento que se sentaba, como por ejemplo en las noches de azafranes. Subía muy a menudo a La Sierra andando o con el burro a comprar ganado para la carnicería.
Muy interesado. Recuerdo que unos meses antes de morir bajo del basurero unas botas, en regular estado, para mí. Recuerdo también un día que estábamos en el campo arrancando guijas y se me clavaban algunas punchas de cardos secos y me paraba a quitármelas, me decía :
– ¡ Déjate las punchas p'al invierno ! Y sigue trabajando.
No sé si ese mismo día u otro que me hacía el remolón en el trabajo, profetizó y oí que le decía a mi padre, sobre mi :
–¡ Éste, ni señorito ni labrador ! ( Ya había empezado yo a estudiar en Teruel con la beca). Y acertó.
Tuvo y todavia tiene 17 nietos. En el año 71 en que murió, le oí quejarse de como llamábamos a Pili, Tere y Mari Carmen :
– Entre la Peli, la Teri y la Meri, vaya lío de nombres.
martes, 11 de febrero de 2020
OCURRIDO EN AQUEL PUEBLO (2)
A aquel muchicho de 4 ó 5 años que volvía de su primer viaje a Teruel le preguntaron:
–¿ Qué tal el viaje ? ¿ Qué has visto ?
– Bien, pero casi todos eran folasteros.
Unos cuántos ganaderos acordaron hacer una reunión para hablar de diversas actuaciones que afectaban a sus ganados.
Hablaron con los demás ganaderos y uno de ellos, al exponerle la idea les
respondió:
– Me parece bien. En hablando de borregos yo soy uno.
En los primeros 60, cuando llegaron las primeras TVs al pueblo, una mujer muy mayor, parienta de mi abuela, cuando se refería a la pequeña pantalla le llamaba " La Misión". ¿ Por qué sería ? Por las predicaciones que hacía algún misionero cuando volvía de tierras de Misión o por las Misiones Pedagógícas del Tiempo de la República. Seguramente sería simplemente vulgarización de la palabra Televisión : Misión.
sábado, 1 de febrero de 2020
OCURRIÓ EN AQUEL PUEBLO (1)
Algunas anécdotas que oyó aquel muchicho en aquel pueblo en aquellos años :
Una mujer llevó a su hijica malica al médico. Al salir le preguntaban las vecinas – ¿ Qué tiene María, que ha dicho el médico ? – Que le falta higiene, más higiene. ( Por supuesto que no conocía el significado de esa palabra)
A un abuelo, el médico le recetó por primera vez unos supositorios para su dolencia y que volviera a los 15 dias.
–¿ Qué tal está, cómo le ha ido lo que le di ? – Bien, pero esas pastillas que me dio estaban muy amargas.
A un hombre muy fachendoso le nombraron concejal y estaba muy ufano y orgulloso de serlo. Un día viajaba en el tren a Teruel y en el compartimento surgió el tema de la gripe y en la conversacion soltó:
– Todos los del Ayuntamiento estamos resfriados.
( De esa manera tan sutil les dió a conocer su condición de edil)
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